No sé si alguna vez os he hablado sobre mi padre. Mi padre, es un señor así como funcionario. Esto no tiene nada que ver, pero yo os lo cuento.
Porque cuando fui a ver su oficina, me dijo "Mira, hijo. Esta es mi oficina". Y lo cierto, es que para lo poco que trabajan, es una sala muy bien equipada. Poco después, bajamos al bar a "descansar" (eso dijo él), y al rato de estar sentados, me comentó de pasada "Ah por cierto, estamos en la oficina 2". Con dos cojones, sí señor.
Esta mañana, mi padre ha recordado algo que quería decirme. Mi padre es considerado, y le gusta respetar mis horas de clase. Así que no ha querido llamarme directamente.
Total, que ha cogido el móvil, y se ha dicho "Pues le mando un sms, ese universo desconocido". En realidad mi padre sí que sabe mandar sms. Sólo que le sale regular.
Cuando me ha pitado el móvil, se ha parado la explicación de clase, y luego he leído el mensaje.
~INTENTO 1:
~INTENTO 2:
Y ya está.
Yo también esperaba un tercer intento, pero no lo ha habido. Ahora después iré a comer a su casa, así que no le contéis que ha salido en mi página. Gracias.
Que te puedes esperar de él.....sin comentarios
ResponderEliminarComprendo tu envidia. Otro día serás la protagonista, mamá. Recuerda el vídeo que te grabé cuando volvistes de Roma ;)
ResponderEliminarvicente, no seas cruel, ni con uno, ni con la otra....piensa que son tus padres (que es como los reyes) y que pertenecen a otra época y sobre todo a otra generación (que se paró y no anda muy fina)
ResponderEliminarHay toda una generación, yo superincluida, que nos creemos que ya sabemos mandar sms con fluidez y vamos y la cagamos con quien sea... ¡y eso que nos quitamos o ponemos las gafas, según el caso!
ResponderEliminar